Se trata de dibujos en forma de círculo y más o menos simétricos. Existen casi desde el comienzo de la humanidad y en todas las culturas. Su función puede ser simplemente decorativa pero también se usan para la meditación, la oración o el desarrollo mental y espiritual. Los motivos pueden ser vegetales, animales, geométricos, abstractos...
En clase los pintamos después de comer los almuerzos y mientras escuchamos la música del compositor que toca en cada momento.
Las normas son que hay que utilizar distintos colores para cada zona delimitada y que hay que pintar despacio y rellenando bien con color. No hay que acabar en un tiempo establecido; pintamos un ratito y después se guarda para seguir al día siguiente.
Al pintar conseguimos relajarnos, aumentar la concentración, mejorar el autocontrol, desarrollar la creatividad...
También sirve para papás y mamás. Una idea: elegid un mandala para vosotros mismos y otro para vuestro hijo/a. Sentaos en un lugar cómodo para pintar, poned música suave y relajante y... ¡empezad a colorear! Veréis cómo descarga el estrés, relaja y os acerca más a padres e hijos.
Podéis encontrar en internet mandalas para descargar y colorear y más información sobre este tipo de dibujos, simplemente tecleando en google "mandalas para colorear".
Aquí tenéis una muestra de las obras de nuestros pequeños artistas.
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